"AHORA ME LEVANTARÉ, DICE JEHOVÁ; AHORA SERÉ EXALTADO,
AHORA SERÉ ENGRANDECIDO."
Isaías
33: 10.
Fuente:
Charles H. Spurgeon
La
Chequera del Banco de la Fe. Traducción de Allan Román.
Cuando
los merodeadores habían vuelto a la tierra tan baldía como si hubiese sido
devorada por langostas, y los guerreros que habían defendido la tierra se
sentaron y lloraron como mujeres, entonces el Señor vino a su rescate.
Cuando
los viajeros desaparecieron de los caminos que conducían a Sion, y Basán y el
Carmelo eran como viñas que no daban fruto, entonces el Señor se levantó.
Dios
es exaltado en medio de un pueblo afligido, cuando busca Su rostro y confía en
Él.
Él es todavía más exaltado cuando, en
respuesta a sus clamores, se engrandece para liberarlos y derrotar a sus
enemigos.
¿Es
un día de aflicción para nosotros? Hemos de esperar ver ahora al Señor
glorificado en nuestra liberación.
¿Nos
hemos entregado a una ferviente oración? ¿Clamamos al Señor de día y de noche?
Entonces
el tiempo señalado para Su gracia está cerca.
Dios
será engrandecido en la ocasión precisa. Él se levantará cuando sea más
propicio para que Su gloria sea manifestada.
Deseamos
Su gloria más de lo que anhelamos nuestra propia liberación. Cuando el Señor es
exaltado entonces alcanzamos nuestro principal objetivo.
Señor,
ayúdanos de tal manera que podamos ver que Tú mismo estás obrando. Que podamos
exaltarte en lo más íntimo de nuestras almas. Haz que todos los que nos rodean
puedan ver cuán grande y bueno eres Tú.
Recibe
una Bendición y un Saludo de Tú Amigo Dios Oye.
Centro
Cristiano “Cristo es la Puerta”
No hay comentarios:
Publicar un comentario