UN INTERCAMBIO DE ACTITUDES.
Fuente: Desconocida por el momento.
“Siéntate, vamos a hablar”…. Es lo que le dije a mi
esposo cuando volvió de trabajar.
Él enseguida prendió el televisor, Y me dijo: “¿Qué
pasa, te escucho?”
-no, sin televisor- le respondí. (Al instante la
apagó)
Estábamos cómodos frente a frente en la mesa, la
niña jugando por allá… y empecé mi “discurso” tranquilamente diciendo:
-Reconozco que muchas veces, te he dicho las cosas
enojada y cuando ya me explotaba la cabeza…
En vez de hablarte me quejaba o te gritaba… sé que
no es forma de decir las cosas, por eso creo que muchos maridos dejan de oír a
sus esposas, por que es mas lo que ladramos que lo que hablamos…
Yo no quiero seguir acumulando la idea de cansarme
de ti, de gritarte una y otra vez lo mismo para que me hagas caso en algo y
cuando ya no aguante mas separarme, o viceversa.
Te propongo cambiar
actitudes: yo
voy a hablarte todas las veces sin gritar, sin tono de queja… estaré sentada,
calmada y con paz para decirte mis inquietudes… y voy a decirte con paz una o
dos veces lo que no me gusta que hagas.
…Y tu me vas a escuchar sin televisor y sin distracción y poniendo ganas de tu parte
en lo que requiero, por ejemplo: “que me consultes tus planes y pensamientos y
no hagas una vida aislada de mí”.-
Así terminó nuestra
conversación, mi esposo se levantó y me abrazó y me pidió perdón… y yo le abracé y también le
pedí perdón por casi 4 años de ¡”ladridos y amenazas”!
Efesios 4:31 y 32 “Quítense de vosotros toda amargura, enojo,
ira, gritería y maledicencia, y toda malicia”.
“Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros,
como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo.”
Reconocer: un gran paso
hacia delante en
cuanto a errores propios.
Perdonar: un abrazo y un
beso que sellen el acuerdo, no
le hacen mal a nadie.
La mayoría de los matrimonios, tenemos el defecto
de mirar lo que el otro hace mal o no hace.
Amar después de muchos años se hace difícil.
Alguien dijo una vez que un matrimonio de muchos
años calza como zapatilla vieja:
“En principio te hace doler pero con el tiempo tu pie
se acostumbra, o la zapatilla se estira y amolda, cuando te das cuenta son
viejas pero no te quieres deshacer de ellas”.
En una pareja cuando no
hay quien ceda al menos debe haber un intercambio de actitudes, como
en toda sociedad hay intercambio de valores, en la pareja el intercambio debe
ser justo y apropiado para suplir la necesidad de cada uno.
¿Quién da y quien se beneficia?
La respuesta es ¡AMBOS!
Efesios 5:25 “Maridos, amad a vuestras mujeres, así como
Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella,
5:26 para santificarla,
habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra,
5:27 a fin de presentársela a sí
mismo, una iglesia gloriosa, que no tuviese mancha ni arruga ni cosa semejante,
sino que fuese santa y sin mancha.
5:28 Así también los maridos
deben amar a sus mujeres como a sus mismos cuerpos. El que ama a su mujer, así
mismo se ama.
5:29 Porque nadie aborreció
jamás a su propia carne, sino que la sustenta y la cuida, como también Cristo a
la iglesia”
Practiquen un cambio de
actitudes empezando por si mismos.
¡Dios les bendiga queridos matrimonios!
Recibe una Bendición y un Saludo de Tú Amigo Dios
Oye.
Centro Cristiano “Cristo es la Puerta”
