CONOCE
LA TIERRA EN QUE CAMINAS
Fuente: Congregación
León de Judá
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Vean cómo es la tierra, y
si la gente que habita en ella es fuerte o débil, si son pocos o muchos. Números
13:18
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Tenemos que conocer la
naturaleza de las promesas que Dios tiene para nuestra vida, y también las
responsabilidades así como también los enemigos que quieren destruir nuestra
vida e impedir las bendiciones de Dios para nosotros.
Porque la vida cristiana no es
un paseo por el parque. Hay lucha. La Biblia dice que el reino de los cielos se
hace fuerte y los valientes lo arrebatan. Así que, necesitas conocer la
naturaleza de esa tierra que Dios pone delante de ti. Es tierra buena, tierra
que fluye leche y miel. Pero una tierra también de batallas, riesgos y
demandas. Se requiere oración, se requiere ayuno, se requiere depurarse uno de
muchas cosas.
Hay que dejar cosas atrás, habrá
que pelear batallas con enemigos que querrán destruir nuestra alma. Porque el
diablo sólo sabe matar, robar y destruir. Él no quiere que una sola vida entre
y se afirme en los caminos del Señor. Él está consagrado a obstaculizar cada
pulgada de terreno que tú quieras conquistar, que Dios te haya entregado.
Por eso es tan importante que
espíes la tierra, que conozcas bien a fondo tus responsabilidades y
privilegios, que conozcas la Palabra. ¿Cuáles son mis compromisos? ¿Cuáles son
mis derechos? ¿Cómo entro yo en el uso de mi herencia, y de lo que Dios ha
declarado sobre mi vida?
Yo creo que eso es lo que Dios
quería lograr al enviar a los hebreos a explorar la tierra. Quería que ellos
entraran a ella, la reconocieran bien, conocieran su naturaleza y estuvieran
claros en cuanto a lo que tenían que hacer y lo que les esperaba por delante,
para que no se sorprendieran de cualquier cosa negativa que encontraran al otro
lado.
Pero aquí viene algo importante,
y es lo siguiente: Para nosotros entrar en toda la bendición que Dios quiere
darnos, lo más importante es que le creamos a Dios. Que sepamos—sí va a haber
guerra, va a haber lucha, va a haber dificultades—pero Dios es más poderoso que
todas esas cosas.
Pablo en su libro a los romanos
dice: “Ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados ni potestades, ni
lo presente, ni lo porvenir, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del
amor de Dios que es en Cristo Jesús”. Hay muchas cosas en la vida que se van a
oponer a nosotros, es cierto. Pero dice Pablo también que, “antes en todas
estas cosas somos más que vencedores”.
No hay nada de malo—al
contrario, yo lo aconsejo-—que tú conozcas a fondo la naturaleza de la batalla
que te espera en la vida cristiana. Que sepas que este mundo no es un lecho de
rosas, que la vida cristiana es una vida de dificultades, de luchas y de
pruebas. Pero también es importante que sepas que “antes, en todas esas cosas”
tú puede ser más que vencedor, y que todo lo que pases y que todos los gigantes
que vengan en tu contra, todos los dramas, todas las dificultades por las
cuales puedas pasar por su vida—todo eso es materia prima para Dios crearse un
hombre, una mujer llena del Espíritu Santo, preparado para toda buena obra.
Dios quiere preparar hombres y
mujeres de una contextura que no se atribule ni se congele, ni se eche a morir
por nada de este mundo. Que sepan que todo lo que el diablo les tire lo pueden
batear de home run y sacarlo del campo porque están ya aguerridos, están ya
preparados, están acostumbrados a la lucha y saben que Dios en todas sus
aflicciones siempre los sacará adelante.
Junto con el salmista, los hijos
de Dios podemos decir, “Muchas son las aflicciones del justo, pero de todas
ellas lo librará Jehová”. Conoce la tierra peligrosa que caminas, pero sabe
también que Dios está contigo para entregarte todo el terreno que pise la
planta de tus pies.
Recibe una Bendición y un Saludo de Tú Amigo
Dios Oye.
Centro Cristiano “Cristo es la Puerta”
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