LA ELECCIÓN DE DIOS
Fuente: El peregrino
que camina junto. Lee Hun
Tiempo con Dios, es
Vida Viva
Las elecciones de Dios muchas veces son inusitadas,
insolitas, para nuestro razonamiento humano. Dios no elige lo que nosotros elegiríamos,
al contrario, elige lo que nosotros no elegiríamos.
Dios comenzó desde una tierra miserable y árida, cuando
manifestó su designio de cumplir la obra de salvación eligiendo un pueblo para
Él.
Jesús nació en un pesebre, donde los judíos ni
llegarían a imaginar que podía ser el lugar donde llegaría el Mesías prometido.
Jesús no eligió a los discípulos más capacitados o
profesionales.
Dios escogió lo necio y lo débil del mundo, para
avergonzar a los sabios y los fuertes.
La salvación se logra por medio de la cruz, que
parecería una necedad.
A través de elecciones como estás, Dios nos hace
humildes.
La razón por la que siento tristeza, mientras trabajo
ayudando a los marginados, es que la mayoría de personas que suben al escenario
de la Iglesia son aquellas de gran profesionalidad y capacidad comprobada,
personas exitosas.
Es verdad que ellos son un desafío para mucha gente,
pero pueden hacer que otros tengan envidia, provocando la competencia.
Jesús, al contrario, levanto a los niños y a los débiles
sociales. Al verlos, las demás personas se habrán sentido culpables y se habrán
ofrecido a ayudarlos, en vez de sentir rivalidad.
Un matrimonio cristiano maduro no subiría al escenario,
con orgullo, a un hijo que todo lo hace bien, es más, subirían al hijo más
débil. Lo que nosotros necesitamos más, no es la profesionalidad o capacidad
sino, la fe que aprende del corazón de Dios y sigue su camino con fidelidad.
Recibe una Bendición y un Saludo de Tú Amigo
Dios Oye.
Centro Cristiano “Cristo
es la Puerta”
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