DAR POR GRACIA LO QUE POR GRACIA HEMOS RECIBIDO
Fuente:
Charles H. Spurgeon
La
Chequera del Banco de la Fe. Traducción de Allan Roman.
Congregación
León de Judá
Ahora
bien, el Señor es el Espíritu; y donde está el Espíritu del Señor, hay
libertad. 2 Corintios 3:17
No
te parezca duro cuando lo dejes en libertad, porque te ha dado seis años con el
doble del servicio de un jornalero; y el SEÑOR tu Dios te bendecirá en todo lo
que hagas. Deuteronomio 15:18
Un
amo israelita tenía que dar la libertad a su esclavo en el tiempo señalado, y
cuando abandonaba su servicio, el amo debía encauzarlo en la vida
proporcionándole una porción liberal.
Esto tenía que hacerlo de todo corazón y con
alegría, y entonces el Señor prometía bendecir el acto de generosidad.
El espíritu de este precepto, y, en verdad, la
ley entera de Cristo, nos obliga a tratar bien a los trabajadores.
Debemos
recordar cómo el Señor ha tratado con nosotros, y esto hace que sea
absolutamente necesario que tratemos benignamente a los demás.
Es conveniente que quienes son hijos de un
Dios lleno de gracia, sean generosos.
¿Cómo
podríamos esperar que el grandioso Señor bendiga nuestro negocio si oprimimos a
quienes nos sirven?
¡Qué
bendición está puesta aquí delante de la mente liberal!
Ser
bendecidos en todo lo que hacemos es ser bendecidos verdaderamente. El Señor
nos enviará esta bendición dividida en partes: una parte como prosperidad, otra
parte como contentamiento de mente, y otra parte con el sentido de Su favor,
que es la mejor de todas las bendiciones.
Él nos puede llevar a sentir que estamos bajo
Su especial cuidado, y que estamos rodeados de Su amor especial.
Esto
convierte a nuestra vida terrena en un gozoso preludio de la vida venidera.
La
bendición de Dios es más que una fortuna. Enriquece, y no agrega aflicción con
ella.
Recibe
una Bendición y un Saludo de Tú Amigo Dios Oye
Centro
Cristiano “Cristo es la Puerta”
No hay comentarios:
Publicar un comentario