DESPUÉS DE LA LLUVIA
Fuente:
Ana María Frege Issa
Este
artículo fue producido por Radio Cristiana CVCLAVOZ.
Cuentan
que Francisco esperaba con entusiasmo el sábado porque su padre le había
prometido ir a pescar si el tiempo era bueno.
Una
prolongada sequía había secado los campos y jardines, pero aquel sábado por la
mañana empezó a llover a cántaros y parecía que la lluvia duraría más de un
día.
El
muchacho, decepcionado, parecía inconsolable y se acercó a su padre, quien estaba calentándose y leyendo un buen libro y
le dijo:
– ¿Cuándo será que las cosas se harán bien?
Su
padre trató de hacerle comprender cuánto necesitaban la lluvia, los campos
secos, pero el muchacho insistió:
– Sabiendo Dios que nosotros tenemos que ir
a pescar hoy, podía haber enviado la lluvia otro día.
Por
la tarde mejoró el tiempo, volvió a salir el sol y su padre lo llevó cerca del
lago.
Quizás a causa de la reciente lluvia o por alguna otra razón que sólo los
peces conocen, éstos mordieron los anzuelos con hambre y padre e hijo llegaron
a casa con una buena cesta de pescado.
Aquella
noche se le pidió a Francisco que diera las gracias antes de cenar. Después de
repetir las palabras de costumbre añadió:
– Señor, y si murmuré contra ti esta mañana
perdóname, pues yo no puedo ver más allá de la nariz, como dice el maestro
cuando no acertamos los problemas, pero tú sabes hacer las cosas mejor.
Quizás
los planes que tenías para tu vida no han estado saliendo como tú deseabas.
Probablemente te has visto en la necesidad de postergar aquellas cosas que,
bajo otras circunstancias, ya estarían terminadas. Pero Dios tiene otros planes
para tu vida y ha mandado lluvia repentina a tu vida.
No
desesperes ni te frustres si las cosas no están saliendo como tu querías, el
que aún no hayas logrado algo no es síntoma de fracaso ni significa que Dios se
ha olvidado de ti o que no escucha tus oraciones; por el contrario, en su
infinita misericordia ha trazado un plan mejor para ti y cuando llegue el
tiempo de cumplir tus metas, tu pesca será mayor de la que imaginabas.
“…Ningún
ojo ha visto, ningún oído ha escuchado, ninguna mente ha imaginado lo que Dios
tiene preparado para quienes lo aman” 1 Corintios 2:9 (NTV)
Confía
en que los planes de Dios para tu vida son perfectos porque te ama, quizás la
lluvia que ha enviado no dure horas, ni tres días, ni unas pocas semanas, pero
puedes estar seguro que este aguacero no sólo beneficiará los campos que tanto
la necesitan, sino que cuando cese tu pesca será sorprendente.
Recibe una Bendición y un Saludo de Tú Amigo Dios Oye.
Centro Cristiano “Cristo es la Puerta”
No hay comentarios:
Publicar un comentario