¿MALAS NOTICIAS?
Fuente: Renuevo de Plenitud
Hace varios años, antes
de que los teléfonos móviles se hicieran comunes, un líder de seminario
preguntó a su auditorio:
-Si alguien viniera a
esta reunión, llamara su nombre y dijera: Tiene una llamada telefónica,
¿asumiría usted que son buenas o malas noticias?
La mayoría del auditorio
admitió que pensarían que son malas noticias, aunque no estaban seguros por
qué.
Esto destaca una
carga común que mucha gente lleva: el temor de malas noticias. Puede ser una
inquietud natural por la seguridad de los que amamos, pero se puede convertir
en un temor irracional de que ocurra una tragedia.
Cuando más miedo tenemos
es cuando más necesitamos confiar en Dios.
El Salmo 112 habla de
una persona que teme al Señor, se deleita en sus mandamientos y es generosa con
los demás. Pero tal vez lo más impresionante sea que: No temerá recibir malas
noticias; su corazón está firme, confiado en el Señor.
Un himno de Frances
Havergal nos recuerda que un corazón que confía es la respuesta a una mente
preocupada: Descansando en Cristo, siempre paz tendré; en Dios confiando, nada
temeré.
La Biblia no
promete que nunca recibiremos malas noticias. Pero sí nos asegura que no
tenemos que vivir cada día con un temor que nos torture de lo que podría pasar.
No temerá recibir malas
noticias; su corazón está firme, confiado en el Señor.
Salmo 112:7
Salmo 112:7
Recibe una Bendición y un Saludo de Tú Amigo
Dios Oye.
Centro Cristiano “Cristo es la Puerta”
No hay comentarios:
Publicar un comentario