LA GRANDEZA DE LA HUMILDAD

LA GRANDEZA DE LA HUMILDAD

Fuente: Camilo García

Este artículo fue producido por Radio Cristiana CVCLAVOZ.

La Humildad es probablemente la más valiosa de las virtudes humanas y a la vez la más escasa en nuestra sociedad actual. La humildad es una actitud del corazón. Esta actitud tiene el poder de sanar, libertar y reconstruir relaciones en las familias y en toda relación humana.

Hoy en día todo mundo reclama “sus derechos” pero muy pocos están dispuestos a ceder esos derechos en pro de la paz, la consideración y el bienestar de otras personas, ni siquiera de ¡su propia familia!

Es increíble que para el hombre contemporáneo sea tan difícil entender que si no se está dispuesto a ceder con humildad, ¡la Paz será imposible! Es necesario pedir perdón y perdonar muchas veces en la vida, y para eso necesitamos tomar la decisión de ser humildes.

¡Muchos decimos que conocemos a Dios y amamos a Dios y le pedimos constantemente por la Paz en el mundo y en la sociedad, pero no estamos dispuestos a vivir en humildad como Él nos enseña!

La verdad es que solo hay una forma de vivir en Paz en este mundo y esa es con humildad, con consideración unos a otros, con mansedumbre y tolerancia. Esto tampoco quiere decir que nos dejemos abusar de otros, pero si, que reaccionemos con humildad y estemos dispuestos a pedir perdón, a perdonar, a negociar y a ceder en nuestros supuestos derechos que por lo general son muy subjetivos. No se trata de reclamar con altanería, orgullo, prepotencia y hasta con violencia, lo cual genera destructivos resultados, sino hablar con mucha humildad que es lo que genera la paz que anhelamos.

Filip. 2.8y9 Y estando en la condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte y muerte de cruz. Por lo cual Dios también lo exalto hasta lo sumo y le dio un nombre sobre todo nombre. Dios mismo, creador de todo cuanto existe, Amo y Señor del Universo, nos dio el más contundente ejemplo de humildad al enviar a su Hijo Jesucristo a vivir en esta Tierra, y no solo a vivir en condiciones muy limitadas desde el punto de vista material, sino a sufrir hasta una de las más crueles muertes que puedan existir en la Tierra. Y pudiendo haber detenido el proceso de sufrimiento, no lo hizo, sino que se humilló hasta lo máximo.

Prov. 15:33 El temor de Dios es enseñanza de sabiduría y la honra precede a la humildad. Lo mejor de la humildad, es que precede a la honra. Todos los que actúan con actitud humilde al final serán honrados y exaltados como nos lo enseña el Diseñador y Creador de nuestras vidas.

Una actitud de humildad puede cambiar completamente la historia de tu vida. Busca en oración a tu Padre Celestial y pídele ayuda para tu decisión de ser más humilde. Y el Dios de toda gracia te bendecirá y llenará tu corazón de Paz, gozo y alegría.

Recibe una Bendición y un Saludo de Tú Amigo Dios Oye.

Centro Cristiano “Cristo es la Puerta”