martes, 1 de abril de 2014

¡ESPOSA MÍA!

¡ESPOSA MÍA!
Fuente: Rafael Ángel Pérez
Este artículo fue producido por Radio Cristiana CVCLAVOZ.

El título que lleva este artículo  es una expresión de la propia boca del famoso cantante y compositor dominicano Juan Luis Guerra.  Hace un tiempo ante una noticia que pretendía cuestionar la estabilidad de su relación conyugal, el señor Guerra reaccionó afirmando cuanta bendición ha sido para su vida estar unido a  su esposa.  Su matrimonio es uno de los más estimados y admirados en la industria de la música popular.  No es la primera vez que el tímido Juan Luis defiende sin vacilar su vida de casado ante la presión noticiosa.
Recuerdo verlo también en una entrevista televisiva a través de una emisora en España, en donde le aclaró al impertinente presentador, cuanto él disfrutaba su relación matrimonial de 27 años. Aprovecho hoy, esta oportunidad para reconocer  la valentía de este humilde productor y músico de fama mundial, a quien no le ha temblado el pulso para exaltar las virtudes del matrimonio.
¿Cuántos de nosotros, los hombres que leemos este artículo hoy, podríamos decir lo mismo a favor de nuestras esposas? ¿Cuándo fue la última vez que le dijimos a nuestra amada que ella era una bendición? ¿En alguna ocasión le hemos pedido a Dios su favor divino en ella?  Bueno, estoy convencido que tenemos delante de nosotros una nueva oportunidad para recordarle a nuestra estimada señora de la casa, cuán importante es ella en nuestra vida.  Jamás, como caballeros debemos olvidar que nuestras damas valoran cada palabra de estima que declaramos de nuestros labios.  Es muy doloroso para una mujer casada, vivir al lado de un ser humano que no expresa nunca las virtudes que posee ella.
Con la pastora Silvana Armentano en nuestro segmento “Mente Abierta”, pude aprender que muchas veces, nosotros los esposos cargamos de mucha culpa innecesaria a nuestras queridas y estimadas esposas. Es más fácil para nosotros identificar sus errores o inseguridades, que dejarle saber a ellas lo agradecido que estamos por toda su entrega y fidelidad a nuestro matrimonio. Según Silvana, nuestras esposas desean más que nada, ser amadas y respetadas. Vivir libres de culpas, que las privan de gozo y seguridad.
Por otro lado, conversando con el consejero familiar Aquiles Fuenmayor en el segmento “Dos Son Mejor Que Uno”, también aprendí que debemos trabajar juntos por causa de nuestra unión. A esta fuerza colectiva la llamó Sinergia.  Debemos promover la cooperación y evitar la competencia. Cada uno de los dos cónyuges tiene una función determinante para el excelente resultado de la convivencia marital. Además estableció que  somos parte de un equipo que provee el espacio para que las debilidades de cada quién se transformen en fortalezas. Para concluir con su exposición en El Antivirus, el pastor Fuenmayor definió la palabra Empatía como la capacidad de ubicarnos emocionalmente en la posición de nuestro esposo o esposa.  De esta manera se puede experimentar la sensación de estar los zapatos de él o ella.
Estoy convencido que muchos esposos como yo, podríamos  llevar nuestros  matrimonios a otro nivel con sólo decirles a nuestras esposas cuanta bendición han sido en nuestras vidas.  Declara a favor ella la promesa que revela Eclesiastés 4:9-10.

Recibe una Bendición y un Saludo de Tú Amigo Dios Oye.
Centro Cristiano “Cristo es la Puerta”



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